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Vie, Abr

MUNDIAL FEMENINO DE FÚTBOL... España sella su histórica clasificación a octavos

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Sin calculadora ni mañana. El presente de España se merecía, por sí mismo, un día como el de hoy: una victoria en juego, estrategia, esfuerzo, aunque no en marcador, para imponer el marchamo en un nuevo límite: por primera vez clasificada para los octavos de final de un Mundial. Sin cuentas ni especulaciones. Esta España se merece el hoy. Y es brillante por sí mismo.

(ABC) El conjunto de Jorge Vilda, ya lo repetían, ha venido a Francia a demostrar la madurez de este fútbol curtido en campos de tierra y cimentado en títulos en las categorías inferiores. Con esa filosofía, impusieron su criterio desde el primer minuto ante una China que amenazaba, pero que cumplió su misión: un empate para pasar de fase sin un temible cruce de octavos.

Las chinas, un mes concentradas a conciencia para este torneo, quedaron empequeñecidas ante la propuesta española: protección del balón, concentración en defensa, rapidez en los pases para la salida y anticipaciones en el centro del campo para evitar los contragolpes.

Una fórmula que funcionó casi de maravilla en la primera parte, con dominio absoluto de España (casi 70 % de posesión y 300 pases por la mitad del conjunto rival), con Caldentey y Mapi León de infranqueable frontera en la retaguardia que mantuvo aburrida a Sandra Paños en la portería hasta los últimos instantes. Pero, en el «casi», lo de todo este campeonato: el gol. Esa chispa que se resiste a aparecer para confirmar también con resultados la superioridad en todas las facetas del juego.

Antes de los diez minutos, Hermoso, con esa virtud que tiene de aparecer en los momentos más oportunos, brindó un regate maravilloso en la frontal del área, pero chocó en su disparo con la espalda de Nahikari García que le brindaba cobertura. A la media hora, medio banquillo ya cantaba gol con su medido cabezazo a la cepa del poste que atajó casi en la línea Peng Shimeng, estrella del partido. A Lucía García le faltó un centímetro en su bota para concretar un pase al punto de penalti. Entre una y otra ocasiones, varias llegadas más, flanco izquierdo sobre todo, sin disparo entre los tres palos. La chispa, otra vez fundida a pesar del esfuerzo.

Un esfuerzo que se notó en los últimos minutos, pues las piernas no llegaban tan rápido y las férreas líneas chinas se estiraron para meter el susto en el cuerpo. Dos veloces llegadas, con Li Ying y Wang Shuang como protagonistas, sirvieron de despertador para las españolas, tan cómodas hasta el momento. Esto es un Mundial. Había que seguir trabajando, y no solo al ataque.

Contra un muro

Con ese despertar chino, la selección regresó del vestuario con algo más de calma, pero la misma ambición hacia la portería rival. Salió Falcón para añadir más velocidad al ataque, pero China se mantuvo firme atrás, demasiado para Lucía García, otra vez con el «uy» en sus botas. Y ante la falta de pólvora, la selección dirigida por Jia Xiuquan se animó. Yan Wang y Gu Yasha invitaron a la fiesta a Paños, rapidísima, sin embargo, para blocar, despejar y tranquilizar.

España era superior y quiso Vilda que los temblores se acabaran con un gol. Descerrajar por fin la defensa rival y romper su estrategia del gol. Apareció Alexia Putellas y dejó a Hermoso como referente arriba. La jugadora del Barcelona tuvo al principio de la segunda mitad un buen remate desde el punto de penalti que se estrelló contra Shimeng. Patri Guijarro volvió a hacer grande a la guardameta china a disparo lejano en el minuto 80. Fueron dos de las opciones más peligrosas entre las múltiples que sumó una España demasiado directa en sus acometidas. Celia Jiménez debutó para adr un poco más de mordiente arriba en los últimos instantes. Hasta tres saques de esquina disfrutó en poco tiempo la selección, pero se obcecó demasiado con entrar por el centro, donde China construía muy fácil la muralla. Imposible el gol, esa rúbrica que hubiera cerrado un partido muy completo, ese matiz que deja huella en los marcadores y la memoria.

Aun sin poder celebrar una segunda victoria mundialista, España festeja el hoy, este presente brillante de acceder a octavos por primera vez en la historia. Mañana (el lunes 24, a las 18.00 horas) tocará presumiblemente Estados Unidos. Noventa minutos para construir más presente y avanzar hacia el futuro.