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Dom, May

Abortada campaña de promoción turística de Acapulco

Opinión
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El grupo responsable lleva años haciendo lo mismo sin éxito

Acapulco debe cambiar y no buscar mercados nacionales e internacionales como un destino turístico del “sexo, drogas y reventón”, si no se cambia esa perspectiva entonces tampoco se logrará el impacto que se busca a saber atraer a más segmentos de vacacionistas. Y es que las estrategias de actualmente se usan en la secretaría de turismo en el estado, han sido la desde siempre. El problema es que la idea de cómo lanzar al puerto a los mercados del mundo, va en función de quiénes buscan su interés de sus negocios, “pues son juez y parte”. Es decir que la campaña se enfoca en un sector o segmento que tenga como principal objetivo promocionar el destino con lo que muchos ya conocen.

Ahora la promoción del Acapulco dirigido a un sector de jóvenes milenios ha generado polémica en redes sociales, a tal grado que muchos comunicadores han emitido una crítica férrea a lo que consideran una “pésima campaña de promoción turística”. Luego lo controvertido de la malograda campaña es que van a la Ciudad de México a presentarla, ahí a los medios nacionales les dicen que, la dicha promoción la harán en medio digitales y redes sociales, entonces muchos se preguntaban qué sentido tiene entonces convocar a la prensa escrita y medios de radio y televisión si esa no es la ruta para hacer el eco.

¿Cuáles son esos medio digitales y bajo qué criterio se escogió para pagarles y llevarán a cabo la promoción? Nadie lo sabe. Lo peor de todo que se sigue presentando a los ojos del mundo a un Acapulco, donde reina el bajo mundo de las drogas, alcohol, sexo y el reventón de las discotecas. Para muchos es dinero tirado a la basura, pues políticos y empresarios del sector turístico se ponen de acuerdo y buscan lo de siempre, la frivolidad y el desenfreno como principal bandera de promoción.

Y mientras tanto trabajadores del famoso restaurante Paradise de la Condesa, bloquearon la Costera porque no les pagaban las prestaciones sociales que por ley deben darles ni tampoco sueldos, curiosamente el dueño de ese lugar, es el hermano del secretario de turismo en Guerrero, Ernesto Rodríguez Escalona, quién desesperado busca reactivar la economía de esa zona, con la oferta del viejo Acapulco. Y es que una cosa es ser pionero en restaurantes de mariscos y otra muy distinta es conocer los grandes mercados de los turoperadores y conocer estrategias de promoción turística de alto impacto, que son cosa muy distintas.

El gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo Flores, dio la cara y en su cuenta de red social, reconoció que la estrategia de promoción turística fue mal planteada y no fue la correcta. Es honrado reconocer los desaciertos sobre todo cuando se usan recursos públicos en una campaña que abortó porque desde que nació tenían un mal congénito.