Tras matazones, quema de camiones y autos, fue puesto en libertad
Culiacán Sinaloa., 18 de octubre del 2019.- La fuga de al menos 39 reos de máxima seguridad en el penal de Aguaruto en Sinaloa, no fue nada con el infierno que provocaron los elementos de la Policía Ministerial en Culiacán, con la fallida captura de uno de los hijos del Chapo Guzmán.
Camiones y autos en llamadas y balaceras por calles y avenidas de Culiacán, provocó temor y miedo entre cientos de habitantes que en ese momento realizaban sus actividades de rutina. Imágenes en las redes sociales del terror que vivieron padres e hijos atrapados en el fuego cruzado que lloraban e imploraban a DIOS que los ayudara.
No era para menos, era una ciudad convertida en zona de guerra. El Ejército, Marina y Guardia Nacional, superada en fuerza y volumen de fuego. Reculó el operativo para capturar al uno de los hijos del Chapo, Ovidio Guzmán López, en Culiacán.
Una grabación de quién es el jefe del Cártel de Sinaloa, dando la orden de que se iniciara la guerra, la pelea pues, en contra de las fuerzas del orden, era tal que todo los elementos armados con artillería pesada, arremetieron contra quienes se negaban a liberar al hijo del Chapo Guzmán.
Se supo que habían capturado a decenas de soldados y mantenían en la mira a sus familias a la espera que si el gobierno respondía en contra de ellos, entonces matarían uno a uno sin misericordia.
Jefes del Ejército en Culiacán, reconocieron que les había asegurado varias unidades e incluso negaron que habían sido capturados fuerzas de élite. Sin embargo, horas después del infierno que se vivió en la capital del estado, el hijo del Chapo Ovidio Guzmán López, fue liberado.