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Sáb, Abr

El presidente de Ecuador pide a Maduro que «saque sus manos sangrientas de Colombia»

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Lenin Moreno afirma que la Inteligencia ecuatoriana ha detectado la injerencia venezolana en las protestas violentas en el país vecino

(ABC).- El presidente ecuatoriano en funciones, Lenin Moreno, que entregará el poder a finales de mes al conservador Lasso, acusó al venezolano Nicolás Maduro de intervenir con sus «manos sangrientas y corruptas» en las protestas violentas de Colombia, para desestabilizar al Gobierno de Iván Duque y pidió el cese de su injerencia en el país vecino. Sus acusaciones frontales contra el régimen chavista las hizo en un foro titulado ‘Defensa de la Democracia en América Latina’ celebrado en Miami y organizado por la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), donde participó como orador principal ante los presidentes de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Paraguay y Perú.

«El pedido es que Maduro saque sus manos sangrientas y corruptas de la democracia y de la estabilidad del pueblo colombiano», dijo ante sus pares latinoamericanos. Moreno aseguró que tanto el servicio de inteligencia ecuatoriano como el colombiano han interceptado la injerencia venezolana en las protestas que se han llevado a cabo en algunas ciudades de Colombia para manifestar contra la reforma fiscal anunciada por Duque y que luego canceló ante la presión y el rechazo de la sociedad.

 

Trabajo conjunto

«Nuestro sistema de inteligencia, al igual que el sistema de inteligencia colombiano, porque hoy por la mañana conversé con el presidente Duque, detectó una injerencia grosera por parte del régimen dictatorial y autoritario de Nicolás Maduro», confirmó el jefe del Ejecutivo de Ecuador a la 'Voz de América'.

 

También denunció que el expresidente ecuatoriano Rafael Correa y el venezolano Nicolás Maduro, llevan a cabo acciones coordinadas «contra el régimen democrático ecuatoriano y regional».

Las acciones violentas o vandálicas también son conocidas como la 'brisita bolivariana', anunciada por Diosdado Cabello, el hombre fuerte del régimen chavista, que el año pasado recorrió varios países de la región.

Moreno añadió que estos «intentos desestabilizadores» liderados por Correa y Maduro «involucran el manejo de recursos públicos» venezolanos, según difundió la Presidencia ecuatoriana en un comunicado.

El mandatario ecuatoriano denunció que el Instituto de Pensamiento Político y Económico Eloy Alfaro, que Correa fundó al final de su mandato, recibió en agosto de 2018 una transferencia del Banco de Desarrollo Económico y Social de Venezuela (Bandes) por 281.000 dólares que sirvió para pagar a sus integrantes, entre ellos al propio expresidente por una cantidad total 96.200 dólares en cuentas de Bélgica y Ecuador.

«Lo insólito de todo esto es que en un país con hambre, miseria y migración multitudinaria, como Venezuela, se desvíen fondos de un banco del Estado, para alimentar cuentas personales de exfuncionarios que intentan desestabilizar mi Gobierno», dijo Moreno durante el encuentro de presidentes de América del Sur. El presidente saliente de Ecuador comentó que esta información la recibió del servicio de inteligencia ecuatoriano, que asimismo le alertó de que «la misma operación la están llevando a cabo en otros países».

Relaciones tensas

«Tengan cuidado con la injerencia de Nicolás Maduro y de Rafael Correa, en próximas elecciones. Habría dineros oscuros de ellos dos, para favorecer a candidatos del mal llamado ‘Socialismo del Siglo XXI’. Eso, en mi país, se considera como delito de peculado. No sé cómo se lo llame en Venezuela», alertó Moreno. El presidente colombiano Iván Duque ha deportado a varios venezolanos que fueron detenidos durante los últimos actos violentos en las protestas como saqueos e incendios provocados a los comercios e instituciones públicas.

Las relaciones entre Iván Duque y Nicolás Maduro han sido duras y tensas. El presidente colombiano ha acusado a Nicolás Maduro de proteger y refugiar en su territorio a los líderes de la narcoguerrilla así como a las disidencias de las FARC-EP y el ELN, las guerrillas comunistas colombianas con las que se llegó finalmente a un acuerdo paz tras décadas de conflicto.

El último conflicto entre ambos gobiernos vecinos son los enfrentamientos armados ocurridos con el Ejército venezolano al sur en la zona limítrofe del estado venezolano Apure y el Arauca colombiano por la disputa de las rutas del narcotráfico, que se saldaron con 16 soldados venezolanos asesinados por las bandas colombianas en las últimas semanas.