Una aventura fuera del matrimonio durante la cita futbolística podría costar hasta siete años de prisión
(ABC).- El mundo del fútbol está contando ya los días que restan para el inicio del próximo Mundial, la gran cita planetaria a nivel de selecciones, pero al mismo tiempo mira con cierto recelo a lo que pueda pasar con la primera Copa del Mundo disputada en invierno (del 21 de noviembre al 18 de diciembre) y en un país con una cultura muy diferente a la de otras sedes que acogieron antes el gran evento. Seguramente sobre el césped las cosas no difieran mucho respecto a Mundiales anteriores, pero en las gradas preocupan las particulares costumbres y leyes de un estado como Catar.
Este martes el 'Daily Star' inglés, citando fuentes policiales, ha advertido de que un encuentro sexual fuera del matrimonio durante el Mundial 2022 podría costar una condena de hasta siete años de cárcel
Pese a que Nasser Al-Khater, presidente del comité organizador, ha querido tranquilizar a los posibles asistentes afirmando que todos los asistentes al Mundial 2022 estarán seguros independientemente de su orientación sexual o cultura, existe inquietud en las autoridades del Reino Unido sobre la posibilidad de que los aficionados británicos se enfrenten a graves castigos por hacer cosas que en su país son aceptadas y habituales.
«El sexo está muy fuera del menú, a menos que vengas como una pareja marido-mujer. Definitivamente no habrá aventuras de una noche en el Mundial. No habrá fiestas. Todos y todas deben mantener la cabeza fría, a menos que quieran arriesgarse a quedarse atrapados en prisión», asegura una fuente policial consultada por el 'Daily Star'.
Las demostraciones de afecto, mal vistas
Catar no permitirá aventuras sexuales fuera del matrimonio ni relaciones homosexuales. En una entrevista con la CNN en diciembre del año pasado el propio Al Khater confirmó sin ambages que «la homosexualidad no está permitida», si bien garantizó que «Catar es un país tolerante» los seguidores LGTBIQ+ podrían viajar al país y asistir a los partidos con normalidad.
«Vendrán a Catar como aficionados y asistentes a un torneo de fútbol y podrán hacer lo que haría cualquier otro ser humano», afirmó, si bien puntualizó: «Las demostraciones públicas de afecto están mal vistas y esto se aplica a todos».
«Catar y los países vecinos son mucho más conservadores y pedimos a los aficionados que respeten. Estamos seguros de que lo harán, así como nosotros respetamos las diferentes culturas, esperamos que la nuestra también lo sea», agregó.
Durante la entrevista, el director del comité organizador de Catar fue preguntado por Josh Cavallo, un futbolista australiano que se declaró públicamente homosexual y compartió su «miedo» por acudir a Catar: «Al contrario, le damos la bienvenida y le invitamos a que venga a conocer el país antes del Mundial. Nadie se siente amenazado aquí, creo que esta percepción de peligro se debe a las múltiples acusaciones y noticias que dan un panorama negativo al país».